I Jornadas Virtuales de TEAF

Uno de los objetivos de Tolerancia Cero es responder a la necesidad de muchas familias con hijos afectados por el Trastorno del Espectro Alcohólico Fetal de recibir información, formación, recursos y herramientas para la crianza de sus hijos e hijas, ya que con ellos no suelen funcionar las habilidades marentales y paternales tradicionales. Igualmente, se trata de un Trastorno poco conocido  por profesionales de la salud, la educación, la justicia, etc. Es por ello, que la primera actividad de Tolerancia Cero es la organización, en colaboración con la Escuela Andaluza de Salud Pública y la Escuela de Familias Adoptivas, Acogedoras y Colaboradoras, de la I Jornadas Virtuales de TEAF dirigidas tanto a familias como a profesionales.

¿Y por qué hemos optado por hacer estas jornadas a través de internet? La razón es bien sencilla. Por una parte, la mayoría de las familias afectadas viven en lugares alejados de las ciudades donde hay especialistas en TEAF, razón por la cual generalmente durante años han vivido un peregrinaje de profesional en profesional sin obtener un diagnóstico acertado del problema. Por otra parte, al realizar las jornadas de esta forma, facilitamos la logística, tanto de las familias como los profesionales, que pueden participar desde la comodidad de sus propios hogares, despachos, etc. ahorrando tiempo y dinero en desplazamientos, alojamientos, etc. Esto es algo posible hoy día, gracias a las nuevas tecnologías.

Para estas jornadas contamos con algunos de los mejores especialistas en el diagnóstico y tratamiento del TEAF, tanto a nivel médico, como psicológico y pedagógico, que se han mostrado muy interesados en esta nueva forma de llegar a las familias afectadas. Las jornadas se van a celebrar los días 21 y 28 de Septiembre, de 16:00 a 18:00 horas. Al final de cada sesión habrá un tiempo de coloquio. Las jornadas se grabarán para aquellas personas que no puedan participar en directo.

En este enlace podéis encontrar más información. La inscripción es gratuita.

 

Día Internacional del SAF

Desde 1999, cada 9 de septiembre se celebra el día mundial del Síndrome Alcohólico Fetal. Se celebra el día 9 del 9 por los nueve meses de embarazo.

El objetivo es de dar a conocer las consecuencias del consumo de alcohol durante el embarazo y las necesidades de los niños, adolescentes y jóvenes que sufren las secuelas de la ingesta de dicha sustancia durante su gestación.

El alcohol es soluble en el agua y la grasa corporal, por lo que la concentración de alcohol en el bebé es casi igual al de la madre, que no necesita ser alcohólica para dar a luz a un bebé con este síndrome. El riesgo se incrementa con un consumo elevado, pero incluso el llamado “consumo social” puede producir daño al feto, ya que simplemente 20 gramos de etanol ya es perjudicial. Y teniendo en cuenta que un vaso de vermut tiene 21 gramos y dos quintos de cerveza tiene 18 gramos, estas cantidades pueden parecer insignificantes, pero resultan fatales para el bebé.

Aunque muchas mujeres reducen o suprimen el consumo de alcohol durante la gestación, se estima que entre un 25%-50% de las mujeres embarazadas en la Unión Europea continúan consumiendo durante este periodo. En España, un estudio reciente indica que el 40,7% de mujeres embarazadas toma alcohol el primer mes de gestación y el 17,1% sigue tomando alcohol los tres últimos meses.

Por tanto, no se trata de un problema de unos pocos, sino de la sociedad en general. El Síndrome Alcohólico Fetal se ha convertido en la Unión Europea en la segunda causa de retraso mental tras el síndrome de Down, siendo la única causa cien por cien evitable.

Los daños que produce en el feto son muy numerosos: anomalías faciales características, trastorno del neurodesarrollo, microcefalia, deterioro intelectual (leve a moderado retraso mental), déficit de atención, hiperactividad, malformaciones cardíacas, tendencia al abuso de drogas y alcohol en la adolescencia y juventud, dificultades con el cumplimiento de las normas y en la aceptación de la autoridad, problemas con la justicia, dificultades para gestionar el dinero y el tiempo, dificultades para llevar una vida autónoma en la edad adulta, etc.

La incidencia del SAF en cada país varía. En España se calcula que puede afectar a 2 de cada 1.000 recién nacidos vivos, pero los Trastornos del Espectro Alcohólico Fetal (TEAF), que cursa con síntomas más sutiles (déficit de atención, dificultades de aprendizaje y alteraciones del comportamiento, que suele estar asociado a fracaso escolar e inicio precoz del consumo excesivo de alcohol), pueden afectar a una población 10 veces mayor.

En cuanto a la población adoptada, no hay datos oficiales, pero los niños procedentes tanto de adopción nacional como internacional, especialmente los de los países del Este, forman un número significativo de afectados por el Síndrome Alcohólico Fetal. En concreto, puede haber en torno a 20.000 menores adoptados procedentes de lo que se conoce como “el cinturón del vodka” (Rusia, Bielorrusia, Ucrania y ex repúblicas soviéticas). Según datos de otros países donde el problema está más estudiado, como es el caso de Suecia, el SAF afecta al 50% de los casos.

No existe un tratamiento específico para el SAF, por lo que es importante hacer un diagnóstico precoz y una intervención temprana para que los niños reciban ayuda en el aprendizaje escolar y el área social. Igualmente importante es dotar de los recursos necesarios a adolescentes y jóvenes afectados.

De todas las personas con necesidades especiales, aquellas que tienen SAF son las que menos parece que tengan ninguna necesidad especial. Si no se aportan ayudas a estas necesidades se les puede estar discriminando de una forma totalmente injusta.

Tolerancia Cero se une en esta fecha a más de 40 organizaciones en 24 países del mundo en la campaña promovida por la Alianza EUFASD , que pretende concienciar sobre los riesgos de consumir alcohol durante el embarazo y para llamar la atención a las distintas administraciones (educativas, sanitarias, judiciales, etc.) de la importancia de atender las necesidades de este colectivo y de mejorar la calidad de vida de las personas afectadas de SAF y sus familiares.

 

Alianza Europea del Saf

Campaña mundial Too Young to drink

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Tolerancia Cero

Todo niño o niña adoptado ha sufrido, al menos, el trauma de la separación de la madre biológica, pero mientras la mayoría no tiene problemas para vincularse con su familia adoptiva, otros sí los tienen. Si al primer abandono le sumamos negligencia, abusos, malos tratos o el paso por distintas instituciones, los efectos negativos se agravarán.

Tolerancia Cero

Aunque muchas personas piensen que con mucho amor y aceptación, el niño/a adoptado va a emprender una nueva vida que le hará olvidar las experiencias traumáticas, negligencia emocional o maltrato institucional que previamente haya podido experimentar, lo cierto es que se necesita un trabajo de elaboración para superarlo, en el que la familia adoptiva juega un importante papel reparador.